domingo, 15 de julio de 2007


Congregación del Oratorio
Artículo principal: Congregación del Oratorio de San Felipe Neri
En 1564 el Papa Pío IV pidió a San Felipe que asumiera la responsabilidad de la Iglesia de San Giovanni de los Fiorentinos. Fueron entonces ordenados tres de sus discípulos. Los religiosos vivían y oraban en comunidad, bajo la dirección de Felipe Neri.
Con el beneplácito del Papa Gregorio XIII, San Felipe y sus colaboradores adquirieron, en 1575, su propia Iglesia, Santa María de Vallicella, que se encontraba casi en ruinas y resultaba demasiado pequeña, por lo que Felipe Neri decidió demolerla y construir una más grande, la llamada "Chiesa Nuova".
El Papa aprobó formalmente la Congregación del Oratorio. Era única en que los sacerdotes eran seculares que vivían en comunidad pero sin votos. Los miembros retenían sus propiedades pero debían contribuir en los gastos de la comunidad. Los que deseaban tomar votos estaban libres para dejar la Congregación y unirse a una orden religiosa. El instituto tenía como fin la oración, la predicación y la administración de los sacramentos.
La congregación, no recibió el reconocimiento final de sus constituciones hasta 17 años después de la muerte de su fundador, en 1612.
Cronología de los acontecimientos más importantes de la vida y obra de San Felipe Neri

1477
Nace, de Felipe y Antonia de Luigi Landi, Francisco Neri, futuro padre de San Felipe.
1492
Cristóbal Colón, atravesando el Atlántico, descubre América.
1498
23 de mayo: Fray Jerónimo Savonarola es quemado en la hoguera, preparada en la Plaza de la Señoría, en Florencia; sus enemigos lo consideran un hereje, mientras que sus seguidores lo ven como un santo. Felipe Neri le tendrá siempre una estima profunda. Pero quizá no fue hereje ni santo.
1513
Abril: Francisco Neri se casa con Lucrecia, hija de Antonio di Andrea y de Lena Soldi da Mosciano, futura mamá de San Felipe.
1514
25 de enero: nacimiento de la primera hermana de Felipe, Catarina, quien morirá el 15 de mayo de 1567, a la edad de 53 años.
1515
21 de julio: nacimiento, a las dos de la mañana, de Felipe, hijo de Francisco Neri y de Lucrecia Soldi, en Florencia, en el barrio de San Pier Gattolino, sobre la Vía Romana.22 de julio: bautismo de Felipe en el bautisterio de San Juan, por ser Juan Bautista di Jacopo bautizante. En ese mismo año nace también Santa Teresa de Avila.
1517
7 de febrero: nacimiento de la segunda hermana de Felipe, Elizabeth.León X confía a la Confraternidad de los Florentinos construir en Roma la iglesia nacional de los florentinos, la futura San Juan de los Florentinos.
1520
8 de septiembre: nacimiento de Antonio, hermanito de Felipe. Muere poco después; de igual manera, en fecha no precisa, muere la mamá. El padre se vuelve a casar, primero, con Alejandra Lenzi y poco después, vuelto a quedar viudo, se casa con otra mujer que le dará un hijo: Rafael, quien muere muy pequeño. Los Neri se trasladan a Costa San Giorgio.
1523
Nace, el 25 de abril, Santa Catarina De'Ricci, en Florencia. A los 13 años entra al monasterio de las Dominicas de Prado.
1524
Francisco Neri queda matriculado entre los notarios florentinos.
1527
6 de mayo: saqueo de Roma.
1528
Fundación de los Capuchinos.
1530
San Antonio Ma. Zacaría funda a los Barnabitas o Clérigos Regulares de San Pablo.
1532-33
Felipe deja la casa paterna y se traslada, pasando por Roma, a casa del tío Rómulo Neri, en San Germán (actual Cassino); transcurridos cerca de dos años, Felipe, después de haber frecuentado el Monasterio de Montecassino y de haber estado en Gaeta, en la "Montaña hendida", se traslada a Roma, teniendo alojamiento en casa de Galeoto del Caccia, a cuyos hijos educa: Miguel llegará a ser sacerdote y rector de San Donato in Chille, en Florencia, e Hipólito se hará cisterciense con el nombre de don Andrés.
1534
San Ignacio, de Loyola funda la Compañía de Jesús o Jesuitas.
1535
Felipe, no obstante que mantiene una sincera amistad con San Ignacio, no acepta entrar en la Compañía de Jesús, antes bien, se inscribe en la Confraternidad de los Espirituales, entonces operantes en S. Jerónimo de la Caridad, diri­gida por Monseñor Cacciaguerra y Persiano Rosa, su confesor, y en la Compañía de San Jacobo, en Augusta, que opera en el solar de la antigua Sociedad del Divino Amor para la asistencia de los enfermos de aquel hospital, ya llamado de los incurables.
1539
Muere, muy joven, San Antonio María Zacaría.
1544
Vigilia de Pentecostés: San Felipe, en las Cata­cumbas de San Sebastián, vive una profunda experiencia mística: el Espíritu Santo, en forma de flama, le entra por la boca, dejando huellas, inclusive físicas, rompiéndole dos costillas.
1543-63
Concilio Ecuménico de Trento en tres fases: la primera se desarrolla en Trento y en Bolonia, las otras dos en Trento.
1548
Felipe, en colaboración con Persiano Rosa, instituye la Confraternidad de la Santísima Trinidad de los Peregrinos Convalecientes.
1550
Año Santo: Felipe y su Confraternidad asisten a cerca de 500 peregrinos cada día.Nace San Camilo de Lellis, quien concluirá su vida, después de haber fundado los Ministros de los enfermos, en 1614.
1551
Marzo: Felipe, por la insistencia del confesor, se encamina al sacerdocio. En esa fecha recibe la tonsura y un poco más tarde las órdenes menores y el subdiaconado en la iglesia de S. Tomás in Parione, de manos de Juan Lunelli, obispo de Sebaste.Sábado Santo: Felipe recibe el diaconado en la Basílica de San Juan de Letrán.23 de mayo: Felipe es ordenado sacerdote en la Iglesia de S. Tomás, in Parione.Desde ese momento Felipe deja la casa de Cacciaguerra y entra definitivamente en el grupo de S. Jerónimo, con sede en el antiguo Convento de los Menores, puesto a disposición en 1524 con el compromiso de asegurar el ministerio de la iglesia anexa.
1554
Felipe transfiere a un local de la Iglesia de San Jerónimo (primer oratorio) los encuentros de meditación y plegaria que hasta entonces se desarrollaban en su recámara.Entre ellos sabemos que participa en esos años el treintañero Francisco Ma. Tarugi (1525-1608), que se hará sacerdote y después cardenal.
1556
Son de este año los Avisos particulares de las Indias de Portugal. Documentos tenidos este año por dos reverendos padres de la Compañía de Jesús. Felipe quedará profundamente conmovido y transmitirá el fervor misionero a sus discípulos.
1557
César Baronio entra a formar parte del Oratorio. Felipe acogerá también a Antonio Gallonio (1556-1605), el futuro biógrafo del santo, mientras que el primero llegará a ser el padre de la historia eclesiástica (Anales).
1559
Abril: grave crisis en el oratorio. Felipe es investigado por el cardenal Vicario Virgilio Rosario y llegan a ser prohibidas las peregrinaciones con el pretexto del orden público.La crisis termina por ser superada con la imprevista muerte del Cardenal Rosario (22 de mayo); el Papa Paulo IV, mejor informado, manda a Felipe, como signo de reconciliación, dos ceras de la anterior Candelaria.11 de octubre: en Florencia en el Rione de S. Pancracio, en la casa del yerno Bernabé Trevi, esposo de Catarina, muere Francisco, papá de San Felipe.
1564
Felipe llega a ser rector de la Iglesia de San Juan de los Florentinos, en la cual pone la residencia, inclusive de sus discípulos. Entre tanto, Baronio es ordenado sacerdote; poco después, también Juan Francisco Bordini y Alejandro Fedeli
1565
A ventaja de sus discípulos, residentes en San Juan de los Florentinos, Felipe dicta la primera regla de la convivencia oratoriana.
1567
15 de mayo: muere Catarina, hermana de Felipe, la cual se había desposado en 1553 con el negociante en sedas Bernabé Trevi, ya viudo y con dos hijos (Bastiano y Alejandro) y una hija (Francisca, que se hace monja en S. Pedro Mártir). De su matrimonio, Caterina procreó dos hijas, ambas monjas después, Diadora (1553) con el nombre de sor Ana María y Lucrecia (1556), con el nombre de sor M. Victoria; Felipe escribirá a sus sobrinas interesantes cartas.
1571
Año de la victoria de Lepanto. Entra Gigli al Oratorio, y es ordenado sacerdote en 1573 y muerto en 1591.Muere Juan Animuccia (nacido en 1534), inscrito en la Confraternidad de San Jerónimo de la Caridad, con Felipe, hasta el 12 de enero de 1555. El ha tenido un papel determinante en el uso de los laude en las reuniones del Oratorio.En 1571-72, después de una probada expe­riencia positiva y otras circunstancias sobre venidas, se delinea claramente la idea de una comunidad de sacerdotes regularmente constituida con una habitación propia y una iglesia propia.
1572-85
Pontificado de Gregorio XIII (Ugo Boncompagni).
1572
San Felipe cura a Baronio de una fiebre persistente.
1575
15 de julio: con la bula de erección Copiosus in misericordia, Gregorio XIII reconoce oficialmente a la comunidad de Felipe (la Congregación de Sacerdotes y Clérigos Seculares, con vida común, llamada del Oratorio) y le asigna la iglesia de Santa María in Vallicela, llamada más tarde Chiesa Nuova por la reconstrucción tenida desde los cimientos: el 27 de septiembre, el cardenal Alejandro Medici, el futuro León XI, colocó la primera piedra.El 4 de febrero nace, en Castello di Serilli, en Francia, Pierre de Bérulle, futuro fundador del Oratorio francés (1611); morirá el 2 de octubre de 1629
1578
San Carlos Borromeo funda los Oblatos, en Milán.
1579
Se funda la comunidad del Oratorio en San Severino Marche (Macerata).
1583
Bosquejo de las Constituciones del Oratorio, en doce y después en cuatro artículos, redactadas por Bordini; siguen los bosquejos de 1588, 1595 y 1601; en 1609 inicia la redacción definitiva, concluida en 1610, y aprobada por Paulo V en 1612.
1584
San Camilo de Lellis funda a los Camilos o Ministros de los Enfermos en el mismo año en que muere San Carlos Borromeo.
1585
La Congregación del Oratorio asume el cuidado de la Abadía Nullius de San Juan in Verme, en Abruzzo, con relativa autoridad ordinaria y responsabilidad de miles de almas.30 de agosto y 11 de octubre: S. Felipe escribe largas cartas, casi tratados espirituales, a sus dos sobrinas religiosas en Florencia, sor Ana María y sor María Victoria Trevi, respectivamente.
1586
Se funda la Congregación del Oratorio en Nápoles, después dominada por el espíritu reformador de Talpa, y apoyada por Baronio y Tarugi.
1588
Felipe comienza a residir establemente en la Vallicella.
1590
Muere Santa Catarina de Ricci
1591
Verano: estalla en Roma una epidemia.
1592
César Baronio publica el opúsculo Diálogo de la alegría cristiana.
1595
En la noche, entre el 25 y 26 de mayo, muere San Felipe, después de haber recibido el Santo Viático del Cardenal Federico Borromeo. El 2 de agosto es abierto el proceso para su cano­nización.
1596
Isabel, hermana de Felipe, casada con Antonio Cioni y viuda en el mismo año del matrimonio (1558), declara en el proceso para la causa de la beatificación de Felipe.
1597
Bula de erección de la Congregación del Oratorio de Clérigos Seculares, en Fermo (Ascoli Piceno), y después también en Palermo, por iniciativa del padre Paolo Pozzo.
1598
Es erigida la Congregación del Oratorio de Brescia, desarrollando la ya existente iniciativade los padres de la paz, por obra del padre Francisco Cabrini y del padre Francisco Santabona.
1598-99
San Francisco de Sales, que está en Roma para presentar un examen episcopal, visita el Oratorio: al regreso, en 1599, erige la C.O. de Thonon, debida principalmente a la iniciativa del padre capuchino Cherubino da Maurienne.
1599
26 de mayo: en el cuarto aniversario de la muerte de Felipe, el Cardenal Alejandro Medici (después León XI) consagra la Chiesa Nuova y se canta la misa solemnemente por primera vez.
1600
6 de julio: el Cardenal F.M. Tarugi pone la primera piedra de la capilla destinada a acoger los restos, conservados incorruptos, de Felipe, y edificada a expensas del patricio florentino Nero del Nero, devotísimo de Felipe.
1602
24 de mayo: en la Vallicella, solemne traslación del cuerpo de Felipe a la capilla edificada por iniciativa de Nero del Nero.
I603
La máscara de cera que se hizo colocar sobre el rostro de Felipe por el cardenal Alejandro Medici es sustituida, por el mismo cardenal, por una máscara de plata.
1604
Muere Juvenal Ancina (nacido en 1543), miembro de la C.O. de Roma y después obispo de Saluzzo. Es proclamado beato en 1890, el 9 de febrero.
1605
Es elegido pontífice el cardenal Alejandro Medici con el nombre de León XI, pero es un pontificado brevísimo (apenas 25 días).
1611
10 de noviembre: primera reunión de seis sacerdotes que constituyen el primitivo núcleo del Oratorio de Francia de Bérulle, reconocido canónicamente el 10 de mayo de 1613 por Paulo V
1612
24 de febrero: con el breve Christi Fidelium Paulo V confirma las Constituciones de la C.O. de San Felipe Neri o Filipenses; la C.O. de Nápoles se vuelve autónoma.
1615
25 de mayo: beatificación de Felipe Neri.
1621
Nace en Bolonia la C.O., por obra del padre Licinio Pío, que recibe de Gregorio XV (Ludovisi, ya cardenal de Bolonia) la Iglesia de la Madona di Galliera.
1622
12 de marzo: canonización de Felipe, mientras Roma lo reconoce como su protector principal y, cada año, el 26 de mayo, excluido el periodo de 1871-1924, la administración de la capital ofrece un cáliz votivo que se deposita sobre el altar de la Vallicella.
1639
Una reliquia de la costilla de Felipe es llevada a la iglesia de la C.O. de Nápoles.
1671
Muere el beato Antonio Grassi (nacido en 1592), de la C.O. de Fermo.
1710
Muere el beato Sebastián Valfré (nacido en 1628), de la C.O. de Torino.
1847
Por iniciativa de John Henry Newman (1801-1890) es erigida la C.O. de Birmingham.
1856
Por iniciativa del padre William Faber (1811-63) es erigida la C.O. de Londres.
1884
Muere el beato Luis Scrosoppi (nacido en 1824), de la C.O. de Udine, restablecida por él en 1856 después de la supresión de 1810; hoy, sin embargo, está extinguida.
1912
Muere el Cardenal Capecelatro (nacido en 1824), que fue de la C.O. de Nápoles y obispo de Capua.
1943
Las varias congregaciones oratorianas, manteniendo no obstante su autonomía, se unen entre ellas en una Confederación.
1958
La Santa Sede, para suplir la falta de un superior general oratoriano, dispone que exista un visitador o delegado elegido de entre los sacerdotes oratorianos en el congreso general celebrado periódicamente (cada seis años) por los representantes (prepósito y delegado de cada congregación y según el número de miembros) de todas y cada una de las Congregaciones del Oratorio Internacional.
1965
Muere el cardenal Julio Bevilacqua (nacido en 1881), de la C.O. de Brescia, maestro de Paulo VI, e insigne predicador, párroco y después cardenal.
1995
IV Centenario de la muerte de San Felipe Neri.



"Quien quiera algo que no sea Cristo,no sabe lo que quiere; quien pida algo que no sea Cristo, no sabe lo que pide; quien no trabaje por Cristo, no sabe lo que hace" -San Felipe Neri

"Como es posible que alguien que cree en Diospueda amar algo fuera de Él". -San Felipe Neri

"¿Oh Señor que eres tan adorabley me has mandado a amarte,por qué me diste tan solo un corazóny este tan pequeño?" -San Felipe Neri



San Felipe Neri1515-1595

Apóstol de Roma

26 de Mayo

Patrón de educadores y humoristas.

Fundador del oratorio en Roma

El hombre busca la felicidad, pero nada de este mundo puede dársela. La felicidad es el fruto sobrenatural de la presencia de Dios en el alma. Es la felicidad de los santos. Ellos la viven en las mas adversas circunstancias y nada ni nadie se las puede quitar. San Felipe Neri ilustra admirablemente la felicidad de la santidad. Dispuesto a todo por Cristo, logró maravillas en su vida y la gloria del cielo.
Nació en Florencia, Italia, en 1515, uno de cuatro hijos del notario Francesco y Lucretia Neri. Muy pronto perdieron a su madre pero la segunda esposa de su padre fue para ellos una verdadera madre.
Desde pequeño Felipe era afable, obediente y amante de la oración. En su juventud le gustaba visitar a los padre dominicos del Monasterio de San Marco y según su propio testimonio estos padres le inspiraron a la virtud.
A los 17 años lo enviaron a San Germano, cerca de Monte Casino, como aprendiz de Romolo, un mercante primo de su padre. Su estancia ahí no fue muy prolongarla, ya que al poco tiempo tuvo Felipe la experiencia mística que él llamaría, más tarde, su "conversión" y, desde ese momento, dejaron de interesarle los negocios. Partió a Roma, sin dinero y sin ningún proyecto, confiado únicamente en la Providencia. En la Ciudad Eterna se hospedó en la casa de un aduanero florentino llamado Galeotto Caccia. quien le cedió una buhardilla y le dio lo necesario para comer a cambio de que educase a sus hijos, los cuales -según el testimonio de su propia madre y de una tía -se portaban como ángeles bajo la dirección del santo.. Felipe no necesitaba gran cosa, ya que sólo se alimentaba una vez al día y su dieta se reducía a pan, aceitunas y agua. En su habitación no había más que la cama, una silla, unos cuantos libros y una cuerda para colgar la ropa.
Fuera del tiempo que consagraba a la enseñanza, Felipe vivió como un anacoreta, los dos primeros años que pasó en Roma, entregado día y noche a la oración. Fue ese un período de preparación interior, en el que se fortaleció su vida espiritual y se confirmó en su deseo de servir a Dios. Al cabo de esos dos años, Felipe hizo sus estudios de filosofía y teología en la Sapienza y en Sant'Agostino. Era muy devoto al estudio, sin embargo le costaba concentrarse en ellos porque su mente se absorbía en el amor de Dios, especialmente al contemplar el crucifijo. El comprendía que Jesús, fuente de toda la sabiduría de la filosofía y teología le llenaba el alma en el silencio de la oración. A los tres años de estudio, cuando el tesón y el éxito con que había trabajado abrían ante él una brillante carrera, Felipe abandonó súbitamente los estudios. Movido probablemente por una inspiración divina, vendió la mayor parte de sus libro y se consagró al apostolado.
La vida religiosa del pueblo de Roma dejaba mucho que desear, graves abusos abundaban en la Iglesia; todo el mundo lo reconocía pero muy poco se hacía para remediarlo. En el Colegio cardenalicio gobernaban los Medici, de suerte que muchos cardenales se comportaban más bien como príncipes seculares que como eclesiásticos. El renacimiento de los estudios clásicos había sustituido los ideales cristianos por los paganos, con el consiguiente debilitamiento de la fe y el descenso del nivel moral. El clero había caído en la indiferencia, cuando no en la corrupción; la mayoría de los sacerdotes no celebraba la misa sino rara vez, dejaba arruinarse las iglesias y se desentendía del cuidado espiritual de los fieles. El pueblo, por ende, se había alejado de Dios. La obra de San Felipe habría de consistir en reevangelizar la ciudad de Roma y lo hizo con tal éxito, que un día se le llamaría "el Apóstol de Roma".
Los comienzos fueron modestos. Felipe iba a la calle o al mercado y empezaba a conversar con las gentes. particularmente con los empleados de los bancos y las tiendas del barrio de Sant'Angelo. Corno era muy simpático y tenía un buen sentido del humor, no le costaba trabajo entablar conversación, en el curso de la cual dejaba caer alguna palabra oportuna acerca del amor de Dios o del estado espiritual de sus interlocutores. Así fue logrando, poco a poco, que numerosas personas cambiasen de vida. El santo acostumbraba saludar a sus amigos con estas palabras: "Y bien, hermanos, ¿cuándo vamos a empezar a ser mejores?" Si éstos le preguntaban qué debían hacer para mejorar, el santo los llevaba consigo a cuidar a los enfermos de los hospitales y a visitar las siete iglesias, que era una de su devociones favoritas.
Felipe consagraba el día entero al apostolado; pero al atardecer, se retiraba a la soledad para entrar en profunda oración y, con frecuencia, pasaba la noche en el pórtico de alguna iglesia, o en las catacumbas de San Sebastián, junto a la Vía Appia. Se hallaba ahí, precisamente, la víspera se Pentecostés de 1544, pidiendo los dones del Espíritu Santo, cuando vio venir del cielo un globo de fuego que penetró en su boca y se dilató en su pecho. El santo se sintió poseído por un amor de Dios tan enorme, que parecía ahogarle; cayó al suelo, corno derribado y exclamó con acento de dolor: ¡Basta, Señor, basta! ¡No puedo soportarlo más!" Cuando recuperó plenamente la conciencia, descubrió que su pecho estaba hinchado, teniendo un bulto del tamaño de un puño; pero jamás-le causó dolor alguno. A partir de entonces, San Felipe experimentaba tales accesos de amor de Dios, que todo su cuerpo se estremecía. A menudo tenía que descubrirse el pecho para aliviar un poco el ardor que lo consumía; y rogaba a Dios que mitigase sus consuelos para no morir de gozo. Tan fuertes era las palpitaciones de su corazón que otros podían oirlas y sentir sus palpitaciones, especialmente años mas tarde, cuando como sacerdote, celebraba La Santa Misa, confesaba o predicaba. Había también un resplandor celestial que desde su corazón emanaba calor. Tras su muerte, la autopsia del cadáver del santo reveló que tenía dos costillas rotas y que éstas se habían arqueado para dejar más sitio al corazón.
San Felipe, habiendo recibido tanto, se entregaba plenamente a las obras corporales de misericordia. En 1548, con la ayuda del P. Persiano Rossa, su confesor, que vivía en San Girolamo della Carita y unos 15 laicos, San Felipe fundó la Cofradía de la Santísima Trinidad, conocida como la cofradía de los pobres, que se reunía para los ejercicios espirituales en la iglesia de San Salvatore in Campo. Dicha cofradía, que se encargaba de socorrer a los peregrinos necesitados, ayudó a San Felipe a difundir la devoción de las cuarenta horas (adoración Eucarística), durante las cuales solía dar breves reflexiones llenas de amor que conmovían a todos. Dios bendijo el trabajo de la cofradía y que pronto fundó el célebre hospital de Santa Trinita dei Pellegrini; en el año jubilar de 1575, los miembros de la cofradía atendieron ahí a 145,000 peregrinos y se encargaron, más tarde, de cuidar a los pobres durante la convalescencia. Así pues, a los treinta y cuatro años de edad, San Felipe había hecho ya grandes cosas.
SacerdoteSu confesor estaba persuadido de que Felipe haría cosas todavía mayores si recibía la ordenación sacerdotal. Aunque el santo se resistía a ello, por humildad, acabó por seguir el consejo de su confesor. El 23 de mayo de 1551 recibió las órdenes sagradas. Tenía 36 años. Fue a vivir con el P. Rossa y otros sacerdotes a San Girolamo della Carita. A partir de ese momento, ejerció el apostolado sobre todo en el confesonario, en el que se sentaba desde la madrugada hasta mediodía, algunas veces hasta las horas de la tarde, para atender a una multitud de penitentes de toda edad y condición social. El santo tenía el poder de leer el pensamiento de sus penitentes y logró numerosas conversiones. Con paciencia analizaba cada pecado y con gran sabiduría prescribía el remedio. Con gentileza y gran compasión guiaba a los penitentes en el camino de la santidad. Enseñó a sus penitentes el valor de la mortificación y las prácticas ayudasen a crecer en humildad. Algunos recibían de penitencia mendigar por alimentos u otras prácticas de humillación. Uno de los beneficios de la guerra contra el ego es que abre la puerta a la oración. Decía: "Un hombre sin oración es un animal sin razón". Enseñaba la importancia de llenar la mente con pensamientos santos y pensaba que para lograrlo se debía hacer lectura espiritual, especialmente de los santos.
Celebraba con gran devoción la misa diaria cosa que muchos sacerdotes habían abandonado. Con frecuencia experimentaba el éxtasis durante la misa y se le observó levitando en algunas ocasiones. Para no llamar la atención trataba de celebrar la última misa del día, en la que había menos personas.
Conversaciones espiritualesConsideraba que era muy importante la formación. Para ayudar en el crecimiento espiritual, organizaba conversaciones espirituales en las que se oraba y se leían las vidas de los santos y misioneros. Terminaban con una visita al Santísimo Sacramento en alguna iglesia o con la asistencia a las vísperas. Eran tantos los que asistían a las conversaciones espirituales que en la iglesia de San Girolamo se construyó una gran sala para las conferencias de San Felipe y varios sacerdotes empezaron a ayudarle en la obra. El pueblo los llamaba "los Oratorianos", porque tocaban la campana para llamar a los fieles a rezar en su oratorio. Las reuniones fueron tomando estructura con oración mental, lectura del Evangelio, comentario, lectura de los santos, historia de la Iglesia y música. Músicos, incluso Giovanni Palestrina, asistieron y escribieron música para las reuniones. Los resultados fueron extraordinarios. Muchos miembros prominentes de la curia asistieron a lo que se llamaba "el oratorio".
El ejemplo de la vida y muerte heroicas de San Francisco Javier movió a San Felipe a ofrecerse como voluntario para las misiones; quiso irse a la India y unos veinte compañeros del oratorio compartían la idea. En 1557 consultó con el Padre Agustín Ghettini, un santo monje cisterciense. Después de varios días de oración, el patrón especial del Padre Ghettini, San Juan Evangelista, se le apareció y le informó que la India de Felipe sería Roma. El santo se atuvo a su consejo poniendo en Roma toda su atención.
Una de sus preocupaciones eran los carnavales en que, con el pretexto de "prepararse" para la cuaresma, se daban al libertinage. San Felipe propuso la santa diversión de visitar siete iglesias de la ciudad, una peregrinación de unas doce millas, orando, cantando y con un almuerzo al aire libre.
San Felipe tuvo muchos éxitos pero también gran oposición. Uno de estos fue el cardenal Rosaro, vicario del Papa Pablo IV. El santo fue llamado ante el cardenal acusado de formar una secta. Se le prohibió confesar y tener mas reuniones o peregrinaciones. Su pronta y completa obediencia edificó a sus simpatizantes. El santo comprendía que era Dios quien le probaba y que la solución era la oración.
El cardenal Rosario murió repentinamente. El santo no guardó ningún resentimiento hacia el cardenal ni permitía la menor crítica contra este.
La Congregación del Oratorio (Los oratorianos)En 1564 el Papa Pío IV pidió a San Felipe que asumiera la responsabilidad por la Iglesia de San Giovanni de los Florentinos. Fueron entonces ordenados tres de sus propios discípulos quienes también fueron a San Juan. Vivían y oraban en comunidad, bajo la dirección de San Felipe. El santo redactó una regla muy sencilla para sus jóvenes discípulos, entre los cuales se contaba el futuro historiador Baronio.
Con la bendición del Papa Gregorio XII, San Felipe y sus colaboradores adquirieron, en 1575, su propia Iglesia, Santa María de Vallicella. El Papa aprobó formalmente la Congregación del Oratorio. Era única en que los sacerdotes son seculares que viven en comunidad pero sin votos. Los miembros retenían sus propiedades pero debían contribuir en los gastos de la comunidad. Los que deseaban tomar votos estaban libres para dejar la Congregación para unirse a una orden religiosa. El instituto tenía como fin la oración, la predicación y la administración de los sacramentos. Es de notar que, aunque la congregación florecía a la sombra del Vaticano, no recibió el reconocimiento final de sus constituciones hasta 17 años después de la muerte de su fundador, en 1612.
La Iglesia de Santa María in Vallicella estaba en ruinas y resultaba demasiado pequeña. San Felipe fue además avisado en una visión que la Iglesia estaba a punto del derrumbe, siendo sostenida por la Virgen. El santo decidió demolerla y construir una más grande. Resultó que los obreros encontraron la viga principal estaba desconectada de todo apoyo. Bajo la dirección de San Felipe la excavación comenzó en el lugar donde una antigua fundación yacía escondida. Estas ruinas proveyeron la necesaria fundación para una porción de la nueva Iglesia y suficiente piedra para el resto de la base. En menos de dos años los padres se mudaron a la "Chiesa Nuova". El Papa, San Carlos Borromeo y otros distinguidos personajes de Roma contribuyeron a la obra con generosas limosnas. San Felipe tenía por amigos a varios cardenales y príncipes. Lo estimaban por su gran sentido del humor y su humildad, virtud que buscaba inculcar en sus discípulos.
Aparición de la Virgen y curaciónFue siempre de salud delicada. En cierta ocasión, la Santísima Virgen se le apareció y le curó de una enfermedad de la vesícula. El suceso aconteció así: el santo había casi perdido el conocimiento, cuando súbitamente se incorporó, abrió los brazos v exclamó: "¡Mi hermosa Señora! "Mi santa Señora!" El médico que le asistía le tomó por el brazo, pero San Felipe le dijo: "Dejadme abrazar a mi Madre que ha venido a visitarme". Después, cayó en la cuenta de que había varios testigos y escondió el rostro entre las sábanas, como un niño, pues no le gustaba que le tomasen por santo.
Dones extraordinariosSan Felipe tenía el don de curación, devolviéndole la salud a muchos enfermos. También, en diversas ocasiones, predijo el porvenir. Vivía en estrecho contacto con lo sobrenatural y experimentaba frecuentes éxtasis. Quienes lo vieron en éxtasis dieron testimonio de que su rostro brillaba con una luz celestial.
Ultimos añosDurante sus últimos años fueron muchos los cardenales que lo tenían como consejero. Sufrió varias enfermedades y dos años antes de morir logró renunciar a su cargo de superior, siendo sustituido por Baronio.
Obtuvo permiso de celebrar diariamente la misa en el pequeño oratorio que estaba junto a su cuarto. Como frecuentemente era arrebatado en éxtasis durante la misa, los asistentes acabaron por tomar la costumbre de retirarse al "Agnus Dei". El acólito hacía lo mismo. Después de apagar los cirios, encender una lamparilla y colgar de la puerta un letrero para anunciar que San Felipe estaba celebrando todavía; dos horas después volvía el acólito, encendía de nuevo los cirios y la misa continuaba.
El día de Corpus Christi, 25 de mayo de 1595, el santo estaba desbordante de alegría, de suerte que su médico le dijo que nunca le había visto tan bien durante los últimos diez años. Pero San Felipe sabía perfectamente que había llegado su última hora. Confesó durante todo el día y recibió, como de costumbre, a los visitantes. Pero antes de retirarse, dijo: "A fin de cuentas, hay que morir". Hacia medianoche sufrió un ataque tan agudo, que se convocó a la comunidad. Baronio, después de leer las oraciones de los agonizantes, le pidió que se despidiese de sus hijos y los bendijese. El santo, que ya no podía hablar, levantó la mano para dar la bendición y murió un instante después. Tenía entonces ochenta años y dejaba tras de sí una obra imperecedera.
San Felipe fue canonizado en 1622
El cuerpo incorrupto de San Felipe esta en la iglesia de Santa María en Vallicella, bajo un hermoso mosaico de su visión de la Virgen María de 1594.